¡Y por fin huvo que crecer! Cuando eres un crio eres tan ingenuo que crees que se crece poco a poco, ¡y una mierda! Es como un tortazo, ¡zas! como el golpe de la rama de un arbol cuando alguien camina delante de ti por el bosque.
El problema es que si me dijeras "me encantas" no podría creérmelo. Ya no se cuando es un juego y cuando es verdad.
Estoy perdida. ¡Espera,espera! No he terminado.
Dime que me quieres. Dímelo porque yo jamás me atreveré a decírtelo primero.
Me daría miedo que pensaras que es un juego.
Sálvame, te lo suplico.