Friends with benefits

Hacer el amor es algo muy íntimo, es una conexión muy especial con la otra persona. Pero para follar sólo hace falta satisfacer nuestras puras necesidades primitivas. No importa si es amigo o desconocido, vamos con un objetivo y esperamos conseguirlo. Lo bueno de esto es que él no lo ve como que lo estoy utilizando, porque también está buscando lo mismo. De hecho, es más bien un contrato mutuo donde los dos estamos de acuerdo y nos utilizamos únicamente para sexo. Personalmente, me gusta saber que tengo a unos cuantos “amigos” con los que puedo contactar en estos casos. No es recomendable depender sólo de uno, porque es muy fácil que tenga otros planes y tengas que acabar “jugando al solitario”.

Ahora bien, considero que hay que tener un mínimo de complicidad con la otra persona. Está muy bien que le veas y te entren ganas de lanzarte encima, pero también debe atraerte su forma de hablar, de expresarse y de ver la vida . Algunos pensaréis que este requisito estaría más ligado a una pareja, pero no lo veo así. He conocido chicos que físicamente me atraían mucho, sin embargo, veía que no me aportaban nada y mi libido acababa por notarlo. Con algunos de ellos he tenido encuentros, todos tenemos necesidades, pero al final dejas de llamarlos. Se trata de una atracción tanto física como psíquica.

Los follamigos necesitan tener un cierto grado de madurez sexual, debemos tener cuidado de escogerlos bien y ver si realmente pueden llevar esta situación. Un amigo me comentaba: “Es que ninguna queréis ser el segundo plato”, a lo que le respondí: “Si te dicen eso es porque están pilladas”. Evidentemente que podemos ver a otras personas, es una relación completamente abierta y, por lo tanto, infiel. Muchas veces, detrás del follamigo hay otra intención. Lo ideal sería encontrar un equilibrio entre ambas partes y poder mantenerlo durante mucho tiempo. La realidad es que, en la mayoría de los casos, siempre hay uno de los dos que acaba pillándose. Y al no conseguir una relación, se conforman con ser su follamiga/o. Es una situación triste porque nos hacemos daño, no somos felices y estamos perdiendo el tiempo proyectando una esperanza en alguien que no está interesado en nosotros. Todavía recuerdo (en mis inicios de vida sexual) cuando a uno de ellos le dije: “Te quiero”. Yo era joven y estaba ilusionada con esa aventurilla. Supongo que no acabé de entender el concepto. Por eso, es muy importante que por un lado haya falta de romanticismo y que por el otro, haya una buena comunicación entre ambos. ¡Ojo! Un ex jamás debe ser tu follamigo. Este es un error que cometemos para intentar retener a esa persona, y lo que conseguimos es  remover sentimientos y estancarnos en el pasado.

Una cosa sí que tiene que quedar clara: los dos tenemos derecho a gozar, por lo que el placer debe ser mutuo. Por experiencia propia, algunos sólo buscan el propio placer en la cama; ese yo-yo en los encuentros ocasionales me parece realmente egoísta. Que la chica/o no te importe no implica que no se merezca pasárselo bien y llegar al orgasmo.

           

Verano 2015.

Madre mía, como lo he disfrutado. 

Desde que deje a mi novio por tener una vida propia no cambiaría esta situación por nada.

Soy más libre que nunca, no tengo que darle explicaciones a nadie, no dependo, no sufro.

Noches de fiesta, de diversión, de disfrutar cada noche sin quedarme en mi casa. Ligar con mil y seguir estando sola, que es lo que más me apetece.

Incluso apetece respirar...fuerte.

Un sábado 29 de agosto, mi mejor amiga y yo nos fuimos a dormir a casa de un chico, un amigo al que conozco unos seis años. 

E hice lo impensable pero lo hice, y no me arrepiento de nada. Me enseño a trata con la gente, a tener a cualquiera comiendo de mi mano, a controlar la conversación para poder controlar la situación.

A que podía tener el mundo en mis manos. Me enseño muchas cosas esa noche y joder, fue una noche increíble.

Mi vida ha cambiado por completo y me encanta.

23 julio

23 de Julio. Tanta vueltas le dí a la cabeza, estar en una relación que no iba a ningún sitio no era para mi.

Hasta que vi al chico al que conocí hace 5 años y me llevaba tan loca. Entonces lo supe. Sabía que tenía que dejar de engañarme a mi misma. Y tras insistir y tener la cabeza hecha un lío lo vi todo claro. Lo vi, y fue inevitable, tenía que pasar. Y no me arrepiento de nada.
Al día siguiente estaba todo más claro, saque fuerzas de flaqueza para dejar al que había sido mi novio por dos años y medio. 
Solo se me ocurría pensar...."Joder, pobrecillo, que pena". Pero la verdad es que yo estaba mejor que nunca. Un poco rara es verdad, pero mejor que nunca.
Fueron dos semanas de llamadas, de conversaciones de whatsapp donde me pedía volver y me lloraba, pero mi respuesta seguía siendo la misma.
Y luego me dí cuenta de que su mundo era una mierda. Más mierda de lo que pensaba, su familia era una mierda y sus amigos eran unos paletos garrulos. Gente que se dedico a inventarse cosas sobre mi sin tener pruebas, mentiras e insultos, fijándose todo el rato en mis redes sociales e insultando.
Pero pese a todo, yo pondré buena cara y seguiré adelante.
No me arrepiento de nada, estoy mejor que nunca. He pasado uno de los mejores veranos de mi vida.
Por otro lado, el chico al que conocí hace cinco años parece intentar hacer algo que no quiero....rayarme la cabeza con tonterías. Como un puto novio todo el día, y eso es lo último que quiero.
Estoy disfrutando mi verano a tope, y no voy a dejar que nadie me pueda.
                                                                                                    

Cara o cruz.

Como dos caras de una misma moneda, donde solo puedes elegir cara o cruz. 
Estas viendo el precipicio y vas sin frenos, y sabes que te la vas a pegar, que vas a caer y no sabes como salvarte, como salir de esta.
Por un lado, el chico con el que he estado dos años, con subidas y bajadas. Con sus cosas buenas y sus tantos defectos, con su carácter y sus tonterías.
Y yo se que no es un chico para toda la vida pero tengo miedo, vivo con miedo aferrada a la idea que tengo de el, idealizando cada momento cuando luego no es así. Cuando hay tantas peleas y no se que hacer.
Y me gusta la estabilidad y la comodidad, y no arriesgo nada. Hasta que vino el. El, que hace 5 años se presento en mi vida y ya ha sido imposible sacarlo.
Aquel que siempre supo que decirme en cada momento y que su voz me pone a temblar. Y llega, como si nada, y pone a temblar mi mundo con tan solo la idea de un beso.
Intento evitar pensar en esta situación, porque se me sale el corazón del pecho cada vez que lo hago, y porque me pone en un estado de nervios y tristeza. Por pensar en que debo dejar atrás una relación que no lleva a ningún lado porque no buscamos lo mismo en la vida.
Y siempre lo he tenido muy claro que algún día acabaría....pero nunca imagine el día en que pasaría. Todo ha pasado tan rápido, y, me encuentro a pocos días de ese 23 de julio y no se que hacer.
Si arriesgarme o volver por el mismo camino.
Y me digo una y otra vez que una vez que lo bese, no podré engañar a alguien de ese modo. Porque él, él hace que todo tiemble, y que me escriba tantas cosas y me haga pensar en tantas cosas, que lo único que quiero es estar sola y dejar de pensar.
Estoy con mi chico y estoy....sosa, sin ganas de nada pensando en él. Y luego llego a mi casa y me pongo a llorar por la idea de estar sola.
No se porque me aterra tanto.

             

Puffffffff......

Últimamente, o mejor dicho, desde hace tiempo que tengo dudas. Y cada vez esas dudas sufren un efecto de bola de nieve. Que ruedan y ruedan, y crecen y crecen.

Y llega un momento que ya nadie puede pararlas. Si es verdad que le quiero, pero hay tantas cosas que van en contra. 

Primero, su contexto, sus amigos. Sus putos e inaguantables amigos. No puedo con ellos, algunos son majos si. Pero no los soporto, sobre todo a ese (M), haciendo siempre lo que el dice y todo el grupo detrás besando por donde el pisa. Y, por supuesto, hay que beber, porque el alcohol es lo más importante. 

Luego esta la super simpática de su amiga (M), la que te mira por encima del hombro y se cree guapa y super amigable y es tonta rematada y más fea que pegarle a un hijo.

Con sus comentarios "graciosos" e "inteligentes". ¡Buagh!

 Y como el se comporto con estos amigos, siempre por encima, siempre lo que ellos digan, para no decepcionar a nadie, para que no piensen mal. Anda y que les den por culo.

Por otro lado, esta su madre. Nunca pensé que tendría problemas con nadie de la familia, pero es que la madre me supera. 

Nunca había conocido a una madre tan garrula, tan de pueblo, soez, ignorante y.....PESADA.

Es que no puedo, es que no la soporto, cada parte de mi desea estar alejada de ella. Siempre con el puto whatsapp, mandandole mensajitos a su hijo: "¿Donde estas?, "¿Que haces?"o "¿Has cenado?". Joder, deja a tu hijo en paz, puta controladora.

Quiere saber a todo momento lo que hace, controlar a su hijo tanto en sus salidas como en su vida. Es una ignorante, no sabe hablar, y quiere tener a su hijito mimado a su lado y da igual si trabaja en un puesto de mierda. No aspira a nada mejor.

Lo peor es el comportamiento de el. Todo el rato con el móvil, porque es muy importante lo que dicen sus amigos o su madre.

Y, por supuesto, lo que dice su madre va a misa. Y ha coartado tanto a su hijo que lo ha cegado por completo. Tiene una devoción por su madre, la defiende de tal modo, es que es un nivel totalmente inferior.

También me molesta como habla algunas veces (mal), palabras de un vocabulario completamente garrulo y de pueblo cerrado. Y lo peor es como me di cuenta de que yo tenía que hablar de forma más simple para que me entendiera, hasta que dije: NO.

Además, esto no es lo que quiero. El es un chico muy bueno y educado, pero yo necesito algo más. Un chico con el que mantener una conversación durante horas.

Con un trabajo, una carrera, unas aspiraciones en la vida, y ya he asumido que eso no va a pasar con el. 

Algún día querré algo más, de hecho, ya lo quiero. Y es imposible que yo me sienta realizada a su lado. Por lo menos a este nivel de inmadurez. Tiene...bromas, bueno bromas. Tonterías de críos pequeños, que a mi no me hacen gracia. Y me dice que no soy graciosa, pero es que son cosas completamente infantiles. 

Esto quizá no sea lo más sano, pero necesitaba desahogarme. 

Podría hacer una lista interminable, pero quizás las cosas que más me molesten se resuman en esto.

Desmintiendo.

A ver...no se lo que la gente piensa cuando le digo que estoy estudiando psicología. Muchos dicen tonterías como: "adivina lo que pienso", "¿me estas psicoanalizando?" o "¿esta noche he soñado con un poni rosa en monopatín, que significa?". 
Vamos a ver...que somos gente normal, no hacemos magia, ni tenemos poderes, ni leemos la mente, ni nada parecido. Tampoco os psicoanalizamos ni nada de eso, y si así fuera tampoco lo haríamos gratis y en nuestro tiempo libre. No, nadie te está psicoanalizando, respira tranquilo…
Además, la gente tiende a contarte sus problemas esperando una solución rápida y eficaz en 5 min, y encima se indignan si les dices un "no lo sé".
También esta eso de...“siendo psicólogo no deberías comportarte así…”.
¿Así como? ¿Como una persona normal? Nosotros también nos enfadamos, nos ponemos tristes y tenemos nuestras cosas.
Además, la gente que dice que psicología no es ciencia, debería actualizarse un poquito.
Porque...caer en la falacia de no considerar la psicología como ciencia es una muestra de ignorancia por un lado, y de excesivo recelo por el otro. De ignorancia, porque la psicología es algo más que Freud y las cuatro chorradas que se muestran en la televisión y en las películas. La gran mayoría de alumnos se lleva una sorpresa al empezar la carrera y descubrir que tiene asignaturas de estadística, biología e informática. La psicología - o buena parte de ella - se esfuerza por seguir el método y por producir conocimiento reproducible.
Si, gente, la psicología sigue el método científico, que novedad.
Es verdad que todavía tiene cierto camino por recorrer antes de alcanzar un estatus científico aceptable. Hay muchos defectos que pulir, teorías superfluas que descartar y pasos que dar hacia una mentalidad más madura.
Pero no todas las ciencias son las matemáticas o la física.
En este caso, poco favor hacen quienes sólo critican. Pienso que hay mucha desinformación, muchos mitos que desmentir y muchas teorías desfasadas que aún siguen vigentes , pero es una ciencia muy nueva, tiempo al tiempo.
No toda la psicología se basa en el Psicoanálisis.

        

 

¿Qué quieres que te diga?

Y...¿qué quieres que te diga? Si ya estoy cansada de ser siempre la culpable de todos los problemas. Si estoy harta de que te vayas, y mi orgullo no me permite decirte que te quedes.

Pero...ayer. Ayer se encendió algo en mi cabeza, algo que me dijo: "tu no eres así". Tan poderoso y tan fulminante que me permitió un rato a solas.

Porque esto no es lo que quiero. Quiero irme fuera, muy alto, y tener alguien a mi lado que lo diera todo. Que con una mirada fuera suficiente. Esas miradas que te dejan sin respiración y se te clavan hasta en el alma.

Quizás no estuviera bien, pero yo me sentí bien. Un rato a solas. Y quizá me arrepienta, pero en ese momento era lo que quería.

El hecho de hacer cumplir mis sueños, conseguir mis metas...es taaan importante para mi, que creo que no sería capaz de renunciar a ello por nada del mundo.

Se que igual no se cumple, pero tengo que intentarlo. Sino estaré toda la vida arrepentida. Y si esa persona no quiere seguir a mi lado, será razón suficiente para que cada uno siga su camino.

Últimamente me viene mucho a la cabeza la idea de que hay alguien ahí fuera que me está esperando. Alguien que lo va a dar todo por mi, alguien que de verdad me haga perder la conciencia. Tan impresionante, que despeje todas estas dudas. Un hombre que sea capaz de dejar todo a un lado solo para abrazarme aunque yo le aparte. Que sea más fuerte el pensamiento de que, por un solo momento, puede perderme. Que me vea a mi por encima de todas esas cosas.

Y...no se si eso es lo que tengo ahora, cuando me dice cosas....que nadie querría escuchar, cuando te dice que tu eres la culpable de todo a pesar de ser siempre la que soluciona....

Es tan frustante.

 

Tiempo.

Al final somos eso, tiempo. Y todo es cuestión de tiempo. El tiempo que emprendemos, el tiempo que nos falta, el tiempo que es tan placentero como angustiante.

Y al final, acabo siempre en el mismo tema, pero como esto es anónimo y personal, se entiende.

Pues bien, parejas. En cuestión, parejas jóvenes. Ya que estas sugieren las relaciones más turbias e inestables, relaciones que se juran un 'para siempre' pero...¿cuanto dura ese 'para siempre'? A veces solo un instante. 

El tiempo es algo a lo que nos tenemos que enfrentar cara a cara cada día. Vivirlo y abrazarlo cada segundo porque no seríamos nada sin el. 

El principio de una relación es siempre la etapa más bonita, cuantos más años pasan, parece que todo es más estable, y realmente así es, pero las cosas también son difíciles. Las peleas se complican, los celos, las inseguridades, el querer controlar a tu pareja y poseerla de tal manera... como si de un objeto se tratará.

Nunca queremos aceptar cuando es el final hasta que nos damos de morros con una situación inaguantable. Y realmente espero no haber llegado a ese punto.

Es bonito tener a alguien con quien compartir tus ratos pero sin llegar a agobiarte. Eso es crucial. Yo no se cuando terminará esta historia, y realmente no quiero saberlo, porque solo la idea es algo que me aterroriza y se que una ruptura es algo difícil y doloroso que deja siempre una pequeña cicatriz escociendo en lo más hondo.

Somos jóvenes y es cierto que hay muchos más chicos y chicas. Y quizás mi hombre este ahí fuera preguntándose donde estoy ahora mismo pero es algo que da muchas vueltas en mi cabeza e intento esconderlo bajo llave.

A veces, los comentarios de la gente influyen, y más aún si vienen de gente importante o...de tus padres. 

Que si esto es mejor para ti, que si tu te mereces esto o lo otro. A veces tienes que pensar en ti misma y no darle más vueltas. 

Lo último que espero es no estar con alguien por costumbre y porque sea lo más cómodo. 

Al final todo pasará porque tenga que pasar y por alguna razón. Dejemoslo así.

Amores de película

Películas. Películas que nos hacen soñar y trasladarnos a otros mundos. Que nos hacen creer que cualquier cosa es posible.

Algunas nos hacen tener unas expectativas demasiado altas. Y, si, me refiero a las películas románticas. Refiriéndome a 50.... y libros como After o sucedáneos.

Mundos donde existe ese hombre perfecto, no ese chico romántico que se cuela por ti desde el primer momento sino ese chico duro, que nos mola más, que nos vuelve locas y que cualquier cosa que haga hace que se nos acelere el corazón.

El tipo de hombre que es  frío a primera vista, impenetrable, que nunca sabes que esta pensando, al que parece que no le importas y de repente aparece para llevarte a un sitio mágico y demostrarte que es capaz de todo y que se preocupa por ti y que en el fondo, tras esa máscara tan superficial, se enamora de la chica.

Ese chico que es capaz de sacarte de quicio, de volverte loca hasta el extremo y de odiar cada cosa que haga pero sigues anhelando una simple mirada suya, un roce o que susurre tu nombre.

El hombre con el que pierdes cualquier atisbo de sentido común, y que cuando te toca tu piel arde y tu corazón se acelera.

Y, no se práctica sexo, se hace el amor. Y se hace lento y disfrutando cada caricia y de repente empieza a sonar una melodía lenta de fondo y la luz se atenúa lo justo para ver lo necesario. Todo es bonito.

Pero, chicas, ese tipo de hombre... NO EXISTE.

La gran capacidad de invención de las autoras (si, en femenino) y de las industrias de Hollywood nos han hecho creer que ese hombre existe y que no es un completo capullo. 

Que es un hombre con un pasado y esta dispuesto -aunque le cueste- a pasar su futuro y presente contigo. 

Y, de verdad, si ese hombre existe... que me lo presenten. Porque todas las chicas están deseando esa bonita historia con ese chico de ensueño que nos han prefabricado y diseñado perfectamente al milímetro. 

O las chicas somos demasiado ingenuas para creernos todos esos cuentos o de verdad esos chicos existen y los tienen escondidos junto a la formula de la Coca-Cola.

Aún así, no hay que conformarse porque... conformarse es limitarse.

      

  

No pido tanto.

Como una pesadilla que se repite una y otra vez. Lo suelo pensar en momentos de debilidad pero siempre acaba en lo mismo: mi futuro.
¿Y qué sería de mi futuro sin mencionar a la persona que puede formar parte de el?
Yo no pido tanto, quiero un futuro brillante. Uno del que poder presumir y que sea una fantástica historia que poder contarle a mis nietos, tan fascinante que resulte casi imposible de imaginar.
Quiero llegar a ser una persona que daría gusto conocer, moverme por mis pasiones sin que ni siquiera el viento me detenga, vivir mi pasión, hablar otras lenguas y triunfar.
¿Que sería de esta vida sino apostamos a lo más alto? Si no nos arriesgamos, si no sufrimos y lloramos nuestras penas, incluir algún que otro fracaso pero seguir adelante y poder mirar nuestros logros desde los más alto del Empire State Building. Y una vez allí, respirar hondo y darnos cuenta de todo lo que hemos conseguido.
No quiero tener que quedarme en casa, con un hombre acomodado en su sofá esperando que un trabajo llame a su puerta, o que venga su madre a ofrecerle uno. Que se conforme con lo que tiene sin querer nunca más, sin pasión ni vivencias.
Es genial tener alguien que te quiera, y que te diga que "jamás encontraré a nadie como tú". Y me emociono con pensarlo, pero soy demasiado soñadora o quizá veo demasiadas películas. Pero si algo he aprendido es que los sueños se pueden cumplir, pero si no ponemos de nuestra parte jamás llegaremos a ser nada.
Necesito a un hombre que se levante cada mañana pensando en ser mejor que el día anterior, que no se conforme con un trabajo regalado o con 600 euros en su cuenta. No pido riquezas ni joyas.
Quiero un hombre que me saque a bailar, que me cante en el coche y que sea capaz de acompañarme a cualquier rincón del mundo. Que no le de miedo otro idioma, otra cultura, otro lugar...
Tener a alguien con quien mantener largas conversaciones y poder pasarme toda la noche hablando hasta caer rendida y, que a la mañana siguiente siga con energía para sacarme una sonrisa.

Siete sitios a los que viajar antes de morir: Nueva York, California, Miami, Hawaii, Sidney, Estambul, Tokyo,...
Difícil elección, me faltan sitios.